Durante la ceremonia de apertura de BlizzCon, Blizzard Entertainment celebró su actual cartera de juegos con un cortometraje que destacó títulos como World of Warcraft, Diablo, Overwatch, Hearthstone y su más reciente lanzamiento: Warcraft Rumble. Sin embargo, StarCraft, una de las series más emblemáticas de la compañía, no recibió atención, continuando así su aparente olvido en los últimos años.
A pesar de esto, StarCraft logró hacerse un hueco en el evento. Con la reciente adquisición de Blizzard por parte de Microsoft, Phil Spencer estuvo presente y no dejó de reconocer la importancia histórica de la franquicia. «StarCraft sentó las bases de lo que eventualmente se convertiría en esports», comentó. «Y con StarCraft 2, fue un catalizador importante para la evolución de los juegos como entretenimiento en vivo».
Tras una década de soporte a StarCraft 2, Blizzard cesó el desarrollo de su icónico RTS y ha mantenido un silencio casi total sobre la serie. Sin embargo, Mike Ybarra, presidente de Blizzard, en una entrevista con Bloomberg, ofreció un destello de esperanza para los seguidores de la saga. Aunque Blizzard se concentra en sus principales generadores de ingresos, Ybarra se mostró abierto a un posible retorno de StarCraft, aunque advirtió que no necesariamente sería como un juego de estrategia en tiempo real (RTS).
Ybarra especificó que no está imponiendo la creación de un nuevo juego de StarCraft, sino que espera a alguien con «visión y pasión» que lleve adelante la idea. La estrategia de Blizzard ha sido similar en el pasado, transformando Warcraft, otro RTS querido, en un universo que ahora da vida a juegos como Hearthstone y las expansiones de World of Warcraft. El ejemplo más cercano de un RTS en este universo es Warcraft Rumble, de naturaleza móvil y similar a Clash.
La posibilidad de que StarCraft abandone sus raíces de RTS sería particularmente lamentable, ya que el género está viviendo un renacimiento, con el resurgir de series como Homeworld y Sins of a Solar Empire, además de que veteranos de Blizzard están desarrollando su propio sucesor de StarCraft, llamado Stormgate. En este contexto, parece ser el momento óptimo para que Blizzard reconsidere su inversión en el género RTS.