Tras el lanzamiento de las nuevas tarjetas gráficas basadas en RDNA, AMD ha estado trabajando en la parte del software de su ecosistema de GPUs. La edición Radeon Software Adrenaline 2020 fue una de las mayores renovaciones del panel de control en años. Radeon Boost, que es esencialmente una implementación centrada en el controlador de la resolución dinámica basada en el movimiento, fue una de las características clave de esas actualizaciones. Otras características notables fueron Radeon Chill, Enhanced Sync, Anti-Lag y Integer Scaling, todas en una ventana.
FidelityFX Super Resolution es el homólogo del DLSS
Pero sin duda, Nvidia DLSS es una de las tecnologías más atractivas de las tarjetas de la multinacional de Jen-Hsun Huang, la cual cada vez tiene mayor interés, y más aún tras implmentarse en el motor gráfico Unreal Engine 4 haciendo que mejore su rendimiento en hasta 180%.
Parece que AMD está trabajando en otra gran actualización del software Radeon, que está previsto que llegue esta primavera. Una de las principales novedades será la inclusión de la alternativa DLSS, también conocida como FidelityFX Super Resolution, que aprovechará la API DirectML para escalar la resolución de la imagen con una pérdida mínima de calidad. A diferencia de la implementación de NVIDIA, se trata de una técnica basada en software que sólo requiere la presencia de la API DirectML de Microsoft para funcionar.
Super Resolution , en teoría, funcionará en todo los hardware, incluidas las tarjetas gráficas RTX de NVIDIA, pero se espera un rendimiento mucho más rápido en las Radeon RX 6000 debido a la caché L3 Infinity Cache presente en la matriz de la GPU. También acelerará el proceso al almacenar en caché más y más datos en el momento, ya que los algoritmos basados en la IA tienden a consumir mucho ancho de banda.
En cuanto a Radeon Boost, la implementación existente mejora básicamente el rendimiento al reducir la resolución de un juego cuando hay mucho movimiento, ya que la mayoría de los detalles se difuminan de cualquier manera. Sin embargo, sufre una notable pérdida de calidad de imagen cuando hay escenas estáticas o de movimiento lento, en las que la caída de la resolución es bastante evidente.
La versión mejorada de Radeon Boost mejora la calidad de imagen en las escenas estáticas aprovechando el nuevo motor RB+ y utilizando VRS para distinguir las partes del frame que están inmóviles y excluirlas del algoritmo.