Bethesda Game Studios, la creadora de epopeyas en mundos de fantasía medieval y yermos postapocalípticos, nos propone ahora una odisea en las estrellas con Starfield. Aunque hubo un primer flirteo con lo intergaláctico en el peculiar DLC Mothership Zeta de Fallout 3, Starfield es el primer salto certero de Bethesda hacia el firmamento.
Mi análisis de Starfield se presenta con cierto retraso respecto a lo habitual, atribuible en gran medida a la falta de tiempo y a que el género no se encuentra entre mis predilectos. Sin embargo, he procurado ofrecer una mirada más meticulosa y menos exaltada en comparación con la cobertura de otros medios, los cuales en ocasiones parecen haberse dejado llevar por la grandilocuencia con la que Bethesda ha enmarcado su título, una estrategia que la compañía no dudó en explotar en un vídeo promocional.
Introducción
Nos encontramos ante un título que se describe con grandiosidad, tanto en contenido como en duración. Starfield despliega ante nosotros una trama principal que nos llevará a través de unas 30 horas de aventuras, pero eso no es todo. También se nos ofrecen cuatro líneas de misiones de facciones, que suman otras 25 horas de narrativa y desafíos. Y cuando crees que has visto todo, aparecen las Misiones Misceláneas, el equivalente del juego a las misiones secundarias que descubrimos explorando las urbes y dialogando con los NPCs. Pero aún hay más, las Misiones de Terminal se presentan como encargos menores y repetibles, generados aleatoriamente, como las cacerías de recompensas, prometiendo mantener el pulso de la emoción latente.
La aura de expectación que rodea a Starfield se ha inflado, alimentada en parte por las promesas grandilocuentes de sus creadores. Se nos ha vendido como una oda a la exploración espacial, pero al descorrer el velo, descubrimos que la exploración es solo una faceta de una joya polifacética. Starfield es una amalgama de artesanía, combate y una narrativa que nos atrapa, llevándonos a una experiencia holística que va más allá de simplemente explorar lo desconocido. Nos invita a interactuar, luchar, crear y descubrir en un universo que parece tener tanto para ofrecer.
Sin embargo, en su intento de abarcar tanto, en ocasiones, se percibe una falta de pulido en algunos aspectos, lo que le impide alcanzar la grandeza que promete. A pesar de sus imperfecciones, Starfield logra ofrecer una experiencia en general satisfactoria, brindando un vistazo a un universo vasto y lleno de posibilidades, aunque aún con margen de mejora para alcanzar el brillo de las estrellas que ambiciona.
Gráficos y Diseño
Starfield hace uso del motor gráfico Creation Engine 2, un paso adelante respecto a las versiones previas utilizadas en otros títulos de Bethesda, aunque aún parece necesitar un salto significativo para cumplir con las expectativas contemporáneas. A pesar de ciertas limitaciones destacables, como la ausencia de vehículos y los controles manuales para las naves espaciales, además de unos modelados y animaciones que dejan mucho que desear, el juego consigue sobresalir en determinados aspectos como su meticulosa iluminación, ciclos de día y noche, y una diversidad de efectos climáticos en los diferentes planetas.
Respecto a los Bugs, Starfield lleva la firma de los habituales bugs made in Bethesda, aunque, afortunadamente, estos no llegan a ser tan graves como para afectar la experiencia de juego de forma notable. Sin embargo, la complejidad intrínseca del juego potencia la aparición de bugs y glitches con cada nueva actualización que se publica, llegando a manifestarse incluso en actividades cotidianas. Bethesda se ha mostrado proactiva lanzando actualizaciones para atender algunos de estos problemas, mostrando un compromiso por pulir la experiencia de juego.
He tenido la oportunidad de probar el juego con todas las configuraciones gráficas al máximo y en una resolución de 4K, manteniendo una tasa de frames en torno a los 60 fps en la mayoría de las situaciones. El equipo utilizado para llevar a cabo esta revisión es el siguiente:
- CPU: Intel Core i9-10900K 5.3 GHz
- RAM: Corsair Vengeance RGB Pro Black 32GB (2x16GB) 3200 Mhz
- GPU: Gigabyte AORUS GeForce RTX 3080 MASTER 10GB
- Pantallas: Acer XB280HK 28″ LED 4K G-Syng
- Discos Duros: Corsair MP600 Force Series 500GB PCIe Gen 4.0 x4 NVMe
Jugabilidad
Combate y Gunplay
En Starfield, el combate presenta momentos emocionantes, ofreciendo una variedad de armas y enemigos que logran mantener la tensión en las batallas. No obstante, el gunplay se queda algo corto, brindando una experiencia que personalmente percibí como anticuada y monótona. Aunque las armas se sienten sólidas, la dinámica de disparo no resultó ser del todo gratificante.
Sin embargo, se aprecia la opción de adoptar un enfoque más táctico en el combate, aprovechando las coberturas y haciendo uso de las armas de precisión, o bien, optar por una modalidad más agresiva. La mecánica de sigilo incorporada añade una capa de estrategia a los enfrentamientos, proporcionando diversas maneras de abordar los desafíos que se presentan.
A medida que avanzamos en la aventura, también descubrimos poderes que enriquecen la dinámica del combate, añadiendo una profundidad adicional que se agradece. Estos poderes ofrecen nuevas posibilidades y tácticas, lo que permite una evolución en la forma en que enfrentamos los desafíos bélicos dentro del juego. Esto, sin duda, añade una capa extra de interés y varía la forma en que abordamos las situaciones de combate, aunque el núcleo del gunplay podría beneficiarse de una revisión para alcanzar una experiencia más gratificante y moderna.
Respecto a la IA de los NPC, es una de las patas de las que cojea el título. Durante mi experiencia he podido apreciar que la IA enemiga muestra un comportamiento errático o predecible, lo que reduce el desafío y la inmersión en el combate. También, los NPC aliados pueden no reaccionar de manera óptima durante las confrontaciones, dejando mucho que desear en términos de apoyo en batalla.
Aunque Bethesda ha estado trabajando en parches para mejorar la IA, aún hay margen de mejora para proporcionar una experiencia de combate más desafiante y una interacción más realista con los NPC en el vasto universo de Starfield.
Exploración
Explorar en Starfield se siente como atender una llamada de curiosidad, donde cada planeta, luna o estación espacial nos propone una nueva aventura. La exploración es más que un mero acto, es una ventana a descubrimientos, misiones inesperadas y encargos que aguardan en los rincones lejanos del espacio. Cada nuevo lugar que exploramos parece aportar algo más a la historia que estamos viviendo.
Las «Actividades» son un detalle encantador en nuestro viaje espacial. Estas misiones secundarias, dispersas en el cosmos, a menudo se sienten como relatos personales que, en algunos casos, tienen un impacto más profundo que la trama principal. Aportan vida a los lugares que exploramos, añadiendo un toque de realismo a un universo ya vibrante.
No obstante, con el paso del tiempo, puede surgir una sensación de repetitividad. Pese a la promesa de un universo vasto, la estructura del juego en ocasiones puede hacer que la exploración pierda algo de su brillo inicial. Además, el proceso de despegar de un planeta y aterrizar en otro se siente lento, con pantallas de carga que interrumpen la inmersión. Este problema se extiende a las ciudades de ciertos planetas, donde las diferentes áreas están divididas por pantallas de carga que también rompen con la fluidez de la experiencia. Esto, sin duda, es un área que puede mejorar para mantener una sensación de continuidad y mantenernos inmersos en la aventura que Starfield propone.
Habilidades
La profundidad y amplitud del sistema de habilidades en Starfield es un pilar central para la experiencia, proporcionando una estructura robusta para la personalización y la mejora continua del personaje. A lo largo de la aventura, tendremos la oportunidad de explorar 82 habilidades distintas, agrupadas en cinco categorías críticas: Físicas, Sociales, Combate, Ciencia y Tecnología. Estas categorías encapsulan una amplia gama de competencias y conocimientos que podremos adquirir y perfeccionar.
Las habilidades en Starfield están diseñadas con una estructura jerárquica, dividiéndose en cuatro tiers o niveles: Novato, Avanzado, Experto y Maestro. Cada tier representa un nivel de maestría en una habilidad particular, y el progreso a través de estos tiers se traduce en mejoras significativas en la eficacia y la utilidad de las habilidades del jugador.
Por ejemplo, en el ámbito de las habilidades físicas, podremos optar por mejorar nuestra capacidad en Boxeo, lo que incrementa el daño de los ataques desarmados, o en Fitness, que amplía la cantidad de oxígeno disponible, vital para la supervivencia en entornos hostiles. También podremos optar por mejorar habilidades como Stealth, que mejora la eficacia en el sigilo y el daño de los ataques furtivos. Estas habilidades, entre otras, conforman el núcleo de la supervivencia y la eficacia en el combate.
La progresión en el sistema de habilidades se logra a través de la experiencia ganada al utilizar habilidades en una categoría específica. Desbloquearemos y mejoraremos habilidades específicas dentro de una categoría a medida que ganemos experiencia en ella, lo que nos permitirá evolucionar y adaptarnos a los desafíos que enfrentamos. Al comienzo de la aventura, desbloquearemos tres habilidades de nivel Novato basadas en el trasfondo que elijamos, proporcionando una base sólida sobre la cual construir.
Crafting e investigación
En Starfield, la investigación y la elaboración se presentan como dos caras de la misma moneda, integradas en un sistema que facilita la personalización y la mejora del equipamiento y habilidades. La investigación se convierte en nuestra puerta de entrada para descubrir nuevas posibilidades de elaboración, mientras que la elaboración nos permite crear y modificar nuestro equipo y recursos, esencial para avanzar y enfrentar desafíos mayores dentro del juego.
El juego nos propone cinco árboles de investigación distintos: Farmacología, Alimentos y Bebidas, Desarrollo de Puestos Avanzados, Equipamiento y Armamento. Cada uno de estos árboles contiene varios proyectos de investigación que, al ser completados, desbloquean nuevas recetas y habilidades. Esta estructura fomenta una exploración profunda y una inversión de recursos y tiempo para desbloquear tecnologías avanzadas y recetas útiles.
En el corazón del sistema de elaboración se encuentran las recetas, que una vez desbloqueadas, permiten la creación de una variedad de ítems incluyendo modificaciones de armas, actualizaciones de trajes espaciales, medicamentos, alimentos, y estructuras para puestos avanzados y edificaciones. A través de la elaboración, podremos producir prácticamente cualquier cosa que necesitemos para nuestra aventura, excepto las naves espaciales, las cuales se adquieren a través de vendedores.
Para hacer uso efectivo de estos sistemas, necesitaremos adquirir las habilidades adecuadas, tener acceso a terminales de elaboración y acumular un stock de recursos. Con los recursos y habilidades adecuadas, podremos mejorar nuestro traje espacial, actualizar nuestras armas, construir puestos avanzados más eficientes y refinar nuestras habilidades culinarias. Este enfoque hacia la mejora continua y la autosuficiencia nos empuja a explorar, experimentar y evolucionar mientras navegamos por el intrincado cosmos de Starfield.
Misiones
En Starfield, las misiones se desglosan en varias categorías que ofrecen una variedad de experiencias. Las Misiones Principales son el núcleo de la narrativa del juego, llevando a los jugadores a través de una serie de eventos intrigantes mientras exploran diferentes planetas en busca de un artefacto. A medida que se avanza, las Misiones Secundarias se descubren explorando los planetas habitados, brindando tareas adicionales y exploración de la historia del juego.
Un aspecto interesante es la relación con los compañeros dentro del juego, que se fortalece con el tiempo y desbloquea las Misiones de Compañeros, proporcionando una dimensión adicional a la interacción dentro del juego. Por otro lado, las Misiones de Facción se vuelven accesibles al unirse a una de las principales facciones en Starfield, añadiendo una capa de lealtad y objetivos específicos de facción a la experiencia del juego.
Para aquellos que buscan un flujo constante de tareas, las Misiones Radiantes generadas proceduralmente aparecen aleatoriamente con cada visita a un planeta. Aunque estas misiones pueden ser genéricas, ofrecen una oportunidad para ganar créditos y explorar el vasto universo del juego.
Adicionalmente, los Tableros de Misiones ofrecen una gama de misiones repetibles con objetivos genéricos, llevando a los jugadores a viajes emocionantes a varios planetas y sistemas solares. A pesar de su naturaleza repetitiva, estas misiones brindan una fuente constante de ingresos y exploración.
Manejo de Naves y Batallas Espaciales
Navegar por el cosmos en Starfield no solo se trata de descubrir lo desconocido, sino también de enfrentar desafíos en combates espaciales que nos esperan en la inmensidad negra. Al saltar de sistema en sistema mediante el salto gravitacional, o al aceptar recompensas y misiones de facciones en conflicto, nos veremos arrastrados hacia el fuego cruzado del espacio estelar.
La anticipación es crucial antes de zambullirse en estos enfrentamientos. Desde el momento que nos otorgan el control de nuestra primera nave, la gestión y el entendimiento de sus sistemas se vuelven vitales.
Al enfrentarnos a una nave hostil, la rutina se vuelve un tanto predecible. Primero, el escaneo de la nave enemiga con nuestros sensores es esencial para iniciar el combate. Una vez en la refriega, la estrategia se torna monótona: desgastar los escudos enemigos con armas láser para luego, una vez bajados, emplear misiles o armamento orientado a despedazar el casco de la nave adversaria.
A pesar de la emoción que puede suponer enfrentarse a lo desconocido en el vacío espacial, el dogfighting o combate cercano, presenta una simplicidad que deja un sabor amargo. La estrategia repetitiva de desgastar escudos y luego atacar el casco puede volverse redundante con el tiempo, restándole cierta profundidad al combate.
En cuanto al manejo de la nave, la experiencia se inclina más hacia lo arcade. A pesar de tener la opción de redistribuir la potencia entre los diferentes sistemas de la nave, la implementación no logra convencer del todo. Le falta ese toque de complejidad o realismo que podría haber elevado la experiencia a otro nivel. La sensación de estar realmente al mando de una nave espacial se ve un tanto diluida por esta simplificación en el control y en las opciones estratégicas durante el combate.
Historia y Narrativa
Sumergirse en Starfield es como abrir un libro de historia galáctica que empieza en el año 2050 con el primer pie humano en Marte, desplegándose luego en una odisea espacial que alcanza su cúspide en 2330, donde nuestra aventura comienza. No solo somos exploradores del cosmos, sino también testigos y protagonistas de una narrativa profunda que reta nuestras perspectivas y nos invita a ser parte de algo más grande.
La trama se despliega en un cosmos donde la humanidad ha alcanzado las estrellas, estableciendo las United Colonies y más tarde la ciudad de New Atlantis como capital. Pero como toda historia de civilizaciones, también somos testigos de alianzas, rivalidades y conflictos. El Freestar Collective emerge como una entidad crucial, marcando una era de desafíos y cambios. Las guerras de Narion y Colonia no son solo eventos históricos, sino también el reflejo de las ambiciones, temores y la lucha por la supervivencia y el poder en un escenario cósmico.
Con el tiempo, emerge Constellation, una agrupación con la mirada puesta más allá de las estrellas, buscando respuestas a preguntas antiguas y descifrando los misterios que el universo guarda celosamente. Los personajes que conocemos, desde su fundador Sebastian Banks hasta la brillante Sarah Morgan, cada uno con sus propios ideales y deseos, tejen una red de relaciones que se entrelazan con nuestra travesía.
Los Artefactos son el nexo que une nuestro presente con un pasado galáctico lleno de intrigas. A través de ellos, desentrañamos poco a poco la historia de la humanidad en el cosmos, y quizás, el destino que nos aguarda. Cada descubrimiento es una pieza del rompecabezas, cada misión es un paso hacia la verdad.
La narrativa nos lleva por un camino de aproximadamente 30 a 40 horas de descubrimientos, conflictos y revelaciones que no solo desafían a nuestro personaje, sino también a nosotros como jugadores. Con cada hora, la trama se vuelve más densa, la galaxia más vasta y nuestras decisiones más significativas.
En Starfield, no somos meros pasajeros del destino, somos actores en una narrativa que se escribe con cada elección, con cada alianza formada y cada enemigo enfrentado. Y al final, quizás descubramos que la verdadera narrativa es el viaje mismo, las relaciones forjadas y las respuestas encontradas en las estrellas.
Sonido y Música
Al adentrarnos en la vastedad de Starfield, uno de los primeros elementos que nos envuelve es su banda sonora épica, que con sus vibrantes tonalidades, nos evoca a aventuras espaciales clásicas como Star Trek. La música se convierte en una compañera fiel en nuestra exploración por el cosmos, aportando una atmósfera que oscila entre lo majestuoso y lo misterioso. Sin duda, Bethesda ha puesto mucho esmero en componer piezas que resuenen con la magnitud del espacio, y que acentúen cada descubrimiento y conflicto que enfrentamos en este vasto universo.
Sin embargo, no todo es un viaje tranquilo por las estrellas. Nos encontramos con turbulencias en el apartado de desincronización de audio con los diálogos en español. Al interactuar con los personajes, notamos que las animaciones al hablar no coinciden con la cadencia y el ritmo del doblaje en nuestro idioma, lo que crea un desfase que, aunque no arruina la experiencia, sí resta un poco de la inmersión que la travesía promete. Este desfase se siente como un pequeño bache en un camino que, por lo demás, está lleno de maravillas sonoras y visuales.
Ahora, a pesar de este desfase, es realmente reconfortante que Bethesda haya dedicado recursos para localizar Starfield al español. El hecho de poder interactuar y comprender la narrativa en nuestro idioma nativo sin estar leyendo es algo que valoramos enormemente. Esta localización no solo demuestra un respeto y consideración hacia una base de jugadores diversa, sino que también nos permite conectar de una manera más profunda con la historia y los personajes que encontramos en nuestro viaje por las estrellas.
New Game+ en Starfield
La modalidad New Game+ se desbloquea tras alcanzar un punto clave en la narrativa de Starfield, específicamente al llegar a la misión denominada «Un paso gigante». La llave hacia esta nueva experiencia es un artefacto especial conocido como Armilar. Al activarlo, el próximo salto gravitacional será un boleto directo hacia el desenlace del juego, aunque se te brinda una advertencia por si decides esquivar este destino. En el área final, puedes optar por regresar por donde viniste o aventurarte hacia una esfera de luz que te catapulta sin remedio hacia el desafío que representa el NG+.
Pisar el terreno del NG+ implica enfrentarse a una serie de cambios sustanciales:
- Conservas aspectos críticos de tu progreso:
- El nivel que hayas alcanzado.
- Las habilidades adquiridas.
- El nivel de desafío de las habilidades que estés mejorando.
- Todos los poderes en el nivel que los tuvieras antes de adentrarte en esta nueva etapa.
- Los datos de escaneo de los planetas que ya hayas visitado.
- El estado actual de tus proyectos de investigación.
- Despedirte de muchos elementos que te acompañaron en tu travesía inicial:
- Todo tu inventario se esfuma, incluyendo armas, armaduras, revistas de mejora y créditos.
- Cualquier objeto resguardado en un baúl personal se perderá en el éter.
- Tendrás que decir adiós a todas tus naves, inclusive aquellas diseñadas meticulosamente en el astillero.
- Las viviendas adquiridas, ya sea mediante compra o misiones, ya no estarán bajo tu nombre.
- Los puestos que hayas erigido también desaparecerán.
- La narrativa principal se reinicia, brindando una hoja en blanco para reescribir tu historia.
- Las relaciones con las facciones y compañeros vuelven a su estado inicial, permitiendo forjar nuevos lazos o romances.
Aventurarse en NG+ se traduce en una experiencia repleta de desafíos renovados. Aunque conservas ciertas bases de tu progreso anterior, la pérdida de elementos clave como el inventario y las naves, inyecta un grado de dificultad adicional que podría seducir a aquellos que buscan poner a prueba su destreza en el universo de Starfield. Esta modalidad se erige como una invitación a vivir la aventura desde una nueva perspectiva, con un nivel de desafío que pone a prueba tanto tu ingenio como tus habilidades.
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El análisis
Starfield
Starfield brilla en su propuesta de exploración espacial y gráficos envolventes, pero tropieza en áreas como el combate y ciertas mecánicas de RPG. La historia principal puede sentirse poco inspirada en momentos, desluciendo un poco la experiencia. Aun con sus fallos, ofrece una aventura espacial satisfactoria que será del agrado de quienes anhelan descubrir vastos cosmos y sumergirse en narrativas intrigantes.
PROS
- Un universo vasto y expansivo para explorar: Starfield ofrece un cosmos lleno de oportunidades para la aventura y el descubrimiento.
- Historia principal bien escrita, aunque las misiones secundarias a menudo roban el espectáculo: La narrativa principal es sólida, pero las misiones secundarias ofrecen una riqueza de oportunidades para la inmersión y el desarrollo del personaje.
- Libertad total en el enfoque del juego: El juego no impone restricciones ni sugiere opciones de juego específicas, permitiendo a los jugadores una verdadera libertad de elección.
- Excelente implementación de New Game+ y múltiples incentivos para jugar de nuevo: La opción de New Game+ y otros incentivos mantienen a los jugadores comprometidos a largo plazo.
- Rendimiento técnico estable: A pesar de algunas deficiencias, el juego funciona de manera relativamente estable y fluida.
CONTRAS
- Motor gráfico envejecido que afecta al rendimiento: Aunque el juego es visualmente atractivo en muchos aspectos, el motor gráfico muestra signos de envejecimiento y puede afectar negativamente al framerate.
- Problemas técnicos típicos de Bethesda: El juego no está exento de los bugs y problemas técnicos que han plagado otros títulos de Bethesda.
- Ausencia de mini mapa: El juego carece de un mini mapa, lo que puede hacer que la navegación sea más desafiante. El mapa estelar es la única alternativa para orientarse.
- Inteligencia Artificial (IA) de los NPC: IA enemiga en ocasiones muestra un comportamiento errático o predecible, lo que reduce el desafío y la inmersión en el combate