El simulador de dictaduras más divertido y surrealista jamás creado, Tropico, ha vuelto de la mano de Kalypso Media y Limbic Entertainment en esta sexta entrega. Comienzo así esta review porque si describo este juego como el género al que realmente pertenece “simulación de estrategia sociopolítica”, además de estar mintiendo, no transmitiría la verdadera esencia de este delirante Tropico 6, que no es otra que comportarte como una auténtico presidente corrupto digno de cualquier república bananera que se precie, desde la época colonial hasta el siglo XXI.
“Bienvenido a la Isla bonita, la vida como debe ser”
[miptheme_dropcap style=»normal» color=»#222222″ background=»»]T[/miptheme_dropcap]ropico combina la estrategia económica y política de los simuladores de ciudades con el más hilarante y absurdo sentido del humor, en el que todos los sucesos históricos se tornan caricaturas, a veces demasiado reales, de sí mismos. Para colmo, tus decisiones como El Presidente de la gran nación Tropico no suelen ayudar a que las cosas sean menos grotescas, y la situación tiende a tornarse realmente absurda con mucha facilidad.
Cada 10 años, el pueblo querrá que se celebren elecciones, y en el caso de perderlas, se acaba el juego, así que debemos tratar de mantener el apoyo de los ciudadanos por encima del 40% o “Discurso Electoral” para convencer a los votantes con retórica y mentiras al más puro estilo Trópico. Los diferentes discursos os puedo asegurar que son hilarantes.
En la época moderna podemos tomar decisiones como la legalización de sustancias, establecernos como un paraíso fiscal o crear una Asociación Caribeña de Comercio
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Novedades
Ahora mismo si habéis jugado las versiones anteriores probablemente os estéis preguntando si realmente hay algo nuevo o diferente. Por supuesto el juego no es totalmente nuevo, podríamos decir que es una versión nueva y mejorada del anterior, que ya nos encantaba, pero la gente de Limbic Entertainment, una nueva desarrolladora alemana, además de todo el rework en los gráficos y el diseño general del juego han incluido las siguientes novedades:
- Enormes archipiélagos que nos obligan a manejar diferentes islas a la vez adaptándonos a las características de cada una ellas.
- Envía a tus agentes al extranjero donde podrán hacerse con maravillas del mundo y monumentos que luego podrás construir tu.
- Construye puentes y túneles para unir islas.
- Transporta a los ciudadanos o turistas en taxi, bus y teleférico.
- Sistema multijugador para hasta 4 jugadores en modos cooperativo o competitivo.
- Puedes seleccionar al presidente o a cualquiera de los habitantes y seguirlos a donde vayan.
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Jugabilidad
La curva de aprendizaje en el juego es muy buena, desde el corto pero perfecto tutorial y luego cada una de las misiones de la campaña, nuestro amado Penúltimo (o el personaje principal de las otras misiones) y las diferentes facciones existentes nos irán indicando a base de peticiones o ultimatums que camino seguir en cuanto a la construcción de edificios y evolución de la economía. La parte política y social, queda completamente a nuestra elección y por supuesto cada una de nuestras decisiones influirá de forma importante en el desarrollo de la simulación.
Hay indicaciones básicas del funcionamiento de cada uno de los edificios a construir, pero no información tan detallada como disponemos en otros simuladores así que gran parte del desarrollo del juego es un poco a base de ensayo y error. Después de todo El presidente no dispone de toda una red de espías y una red de información para saber que piensa y hace cada uno de sus ciudadanos ¿no? Bueno si….pero la información de la productividad de sus edificios, los datos de comercio, las previsiones económicas o los productos de consumo y comercio disponibles no parecen ser tan importantes. En Tropico 6 lo realmente importante son los aspectos socio-económicos, hay que ganar elecciones, que el estado esté completamente arruinado no parece importar demasiado a nadie ni a ti ni a los votantes. El juego es demasiado realista a veces.
Mediante investigaciones o simplemente pagando podemos desbloquear diferentes edictos, desde la siesta obligatoria o los coches gratuitos del más puro estilo comunista hasta la policía militarizada, la ley seca o la ley marcial de las dictaduras militares. En la guerra fría podemos elegir ir por el lado nuclear y permitir que se realicen pruebas nucleares en nuestro hermoso archipiélago tropical o por el contrario establecer la separación de residuos obligatoria y la carne feliz por un mejor trato de los animales de nuestras granjas. En la época moderna podemos tomar decisiones como la legalización de sustancias, establecernos como un paraíso fiscal o crear una Asociación Caribeña de Comercio ¿Esto tampoco os resulta familiar?
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Contenido
En esta entrega de Tropico disponemos de 14 misiones principales además de la misión inicial del juego, cada una con su propia línea argumental, nuevos personajes y archipiélagos con sus propias características. Para que podáis haceros una idea, mis 20 horas de juego han sido únicamente realizando la misión principal de la campaña y podría pasarme 50 más así.
Por si todo esto fuera poco, para los más aventureros existe la posibilidad de jugar en modo libre (o modo rojo en lenguaje Tropico) a mapas en el Modo “Paraiso Tropical”, los 14 de la campaña mas 15 propios de este modo de juego y 1 aleatorio, con diferentes opciones a elegir, desde la época de inicio hasta la regularidad de los desastres o cómo alcanzar la victoria. Este mismo modo además dispone de una pestaña con “Mapas de la Comunidad” que imagino irá aumentando tras el lanzamiento oficial del juego.
A todo esto aún queda añadir las opciones multijugador. En definitiva, el juego tiene muchísimo contenido. Algo que no es demasiado común hoy en día.
Construcción
La construcción es uno de los factores que más influyen en la jugabilidad de un simulador. En el caso de Trópico 6 la construcción en un archipiélago con terrenos irregulares y muy dispares tiene bastante complicación. Las granjas, Ranchos de animales y otros edificios tendrán mayor productividad dependiendo del terreno en el que los construyamos, pero cerca de cada edificio donde haya trabajadores deberemos construir también casas para los trabajadores y todos los servicios que estos requieren, además de conectarlos con la isla principal para que podamos utilizar o comerciar con la producción, y construir carreteras es un infierno en este juego. Podemos construir un puente que cruce medio mar, pero un pequeño desnivel de una montaña ya nos impide que una carretera pase por allí y hay que dar tooooooda la vuelta, por si fuera poco la mayoría de edificios necesita estar conectados a una carretera para recibir o enviar mercancías con lo que construir se convierte un poco en una complicada partida de tetris que no puedes ganar.
A pesar de los dolores de cabeza que nos dan las carreteras, construir es muy divertido y tiene su parte creativa también. Existe una gran variedad de construcciones disponibles, tal vez no tantas como en otros simuladores pero también debido a la temática del juego las posibilidades están más limitadas. Para mi es suficiente con los más de 150 edificios disponibles para construcción y 17 maravillas del mundo, teniendo en cuenta que no son el foco principal de este simulador. Al fin y al cabo el espacio está limitado, tampoco íbamos a poder poner mucho más.
Gráficos
Tal y como dice la canción principal del juego “Bienvenido a la isla bonita….”. Nuestro archipiélago es un auténtico paraíso tropical, lleno de exuberante vegetación, cristalinos ríos y musicales cascadas, peligrosos volcanes y por supuesto kilométricas playas de arena coral y aguas color turquesa. Lo que todos soñamos cuando pensamos en unas idílicas vacaciones en el Caribe.
Se pueden dibujar paisajes realmente bonitos con todos los bellísimos modelos de edificios disponibles llenos de variopintos detalles y que creo que combinan a la perfección tanto con el entorno como entre ellos, haciendo que sea un placer tomarse un descanso de las exigencias del sillón presidencial para salir a dar un paseo por nuestra hermosa isla y observar a los trabajadores en las plataneras, ir al teatro, a la embajada o visitar la fábrica de chocolate local y saludar a los votantes. Y si no te gusta lo que ves, siempre puedes robar la Torre Eiffel y plantarla en medio de la ciudad, que eso lo arregla todo.
Sonido
La música de Tropico 6 es ….. No se lo que es, pero combina perfectamente con el resto del juego. Es la versión de la música caribeña que los primeros emigrantes a Estados Unidos pudieron reproducir en su nuevo país, sin tener buenos instrumentos, orquestas que los acompañaran o siquiera grandes cantantes, con un ordenador ¡y con mucho flow! Es una caricatura de la música caribeña igual que el resto del juego. Es la musiquita que te ponen de fondo en la piscina de tu hotel de lujo en Cancún. No es salsa, no es merengue, pero se le parece lo suficiente para que te resulte familiar y combine con tu mojito y tu pamelita.
He intentado buscar en los créditos a los creadores de la música del juego y no he sido capaz de encontrarlos. Simplemente quería saber a quien debía agradecer esta sensación de amor-odio que siento cada vez que juego a Tropico y no es que sea mala …se deja escuchar, hasta te hace mover los hombros a ratos, pero te taladra el cerebro a ratos. En resumen creo que es simplemente perfecta para Tropico 6. No existía otra opción.
Eso sí no me culpéis a mí si os encontráis en la cama a las 3 de la mañana y os taladra el cerebro un estribillo de *maracas* el malo …. *guitarrita* El feo…. y el otro…*piano* ¡HUUUH¡ …¿QUIEN? *bongos* …. Aquél”
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Conclusión
[miptheme_dropcap style=»normal» color=»#222222″ background=»»]T[/miptheme_dropcap]ropico 6 es un juegazo. Todas las facciones diferenciadas, las dispares investigaciones, los extravagantes discursos y que lo realmente importante sean los trapos sucios, las trampas bajo la mesa y el dinero que tengas escondido en suiza hacen que este juego enganche como pocos. En 2 días le he metido 32 horas de juego sin pestañear, solo para escribir esta review y aún me quedan muchas, muchas más. Totalmente recomendado.
Para mi, que soy irremediablemente benévola a la hora de jugar simuladores, lo más divertido de Tropico 6 es que te invita a que lo hagas mal, a que seas corrupto, cruel, contaminante y mentiroso, a que lo hagas mal aunque puedas hacerlo bien y aún así ganes las siguientes elecciones. Como ya he dicho anteriormente, es demasiado real.
Hay mucha gente que se queja de que cada uno de los nuevos Trópicos es más de lo mismo y es cierto que lo esencial no cambia demasiado, igual que ocurre con cualquiera de los otros grandes simuladores en el mercado, pero yo diría más bien que se trata de una versión mejorada del anterior, los creadores del juego han conseguido que todas y cada una de las piezas que lo componen encajen a la perfección y si ya es perfecto….¿para qué tocarlo? Así que si ya has jugado los anteriores Tropico y te han gustado sabes que esté también te encantará y si no los has jugado no sé a qué estás esperando para probarlo. Repito, es un juegazo!
