En un reciente vídeo titulado «DEJO el WOW RETAIL (THE WAR WITHIN) 🤬 Xokas», el conocido streamer El Xokas ha generado una tormenta de críticas y controversias con sus explosivas declaraciones sobre la última expansión de World of Warcraft y su experiencia personal con Blizzard. En un tono claramente frustrado, Xokas no solo despotricó sobre el estado actual del juego, sino que también dirigió ataques directos hacia un empleado de una empresa subcontratada por Blizzard, lo que ha levantado más de una ceja dentro de la comunidad.
Durante el vídeo, Xokas, que lleva años trabajando en colaboración con Blizzard y ha sido un promotor destacado del juego en España, comenzó expresando su descontento con la expansión The War Within. Según él, la expansión es simplemente «Dragonflight 2.0», una repetición de una versión anterior que ya había considerado deficiente. Afirma sin tapujos que la nueva expansión es una de las peores que ha visto, especialmente en lo que respecta al PvP. Xokas no se contuvo al calificar la expansión como «una absoluta pérdida de tiempo», y cuestionó duramente las decisiones de diseño tomadas por Blizzard.
Sin embargo, lo que realmente ha incendiado las redes no fue tanto su crítica al juego, sino su arremetida contra un empleado en particular, a quien nombró directamente: Rafa, un trabajador de la empresa subcontratada, responsable de gestionar las relaciones con creadores de contenido en España. Xokas afirmó que este empleado ha sido un desastre en su labor, ignorando a los creadores de contenido y fallando en proporcionar las claves de acceso anticipado a la expansión, claves que Xokas solía recibir en el pasado gracias a su larga relación con Blizzard.
La importancia real de Xokas para Blizzard: ¿tan grande como él cree?
Xokas narró con detalles cómo, tras años de colaboración estrecha con Blizzard, de repente se encontró ignorado por Rafa, quien, según el streamer, ni siquiera responde a los mensajes en Discord. “Rafa ni contesta el Discord, no hace nada, no manda códigos, no ayuda en nada, es una vergüenza«, explotó Xokas. Continuó criticando la decisión de Blizzard de subcontratar la gestión de los creadores de contenido a una empresa externa como AEK, insinuando que esta elección ha llevado a un deterioro en la calidad del trato que reciben los influencers, especialmente aquellos que, como él, han sido leales y han apoyado el juego durante años.
En un tono cada vez más alterado, Xokas lamentó que, a pesar de todo lo que ha hecho por Blizzard y World of Warcraft, ahora se vea relegado a un segundo plano, mientras «tías con 20 viewers» reciben tratos preferenciales y acceso a contenido exclusivo. Esta crítica, además de apuntar directamente al empleado subcontratado, también dejó entrever un cierto desprecio hacia otros creadores de contenido, sugiriendo que él debería tener prioridad debido a su historia y popularidad.
El streamer no se detuvo ahí. Denunció lo que considera una falta de respeto por parte de Blizzard hacia los creadores de contenido, afirmando que la compañía está más interesada en «chupapollas» que en aquellos que verdaderamente aman el juego y lo han promovido de manera genuina. En su explosiva diatriba, también lanzó dardos contra la estructura de precios de la nueva expansión, calificándola como «un atraco», refiriéndose a los casi 100 euros que algunos jugadores han tenido que pagar para acceder anticipadamente al contenido.
Xokas argumentó que esta estrategia divide a la comunidad entre aquellos que pueden permitirse el lujo de pagar precios desorbitados y los jugadores «normales» que se ven obligados a esperar. Según él, Blizzard está creando una brecha innecesaria entre jugadores ricos y pobres, lo cual, en su opinión, va en contra del espíritu comunitario del juego. Además, criticó duramente el hecho de que quienes pagaron más para jugar antes se encontraran con un mundo vacío, sin contenido significativo hasta que se lancen las actividades principales del PvE, como las míticas plus y las raids.
No es la primera vez que Xokas expresa su descontento con Blizzard, pero esta vez ha llevado su frustración a un nivel personal, atacando a un empleado específico y cuestionando la gestión interna de la compañía. La comunidad ha reaccionado de diversas maneras: algunos apoyan sus críticas sobre el estado del juego y los precios, mientras que otros consideran que su actitud ha cruzado la línea, mostrándose con un claro «síndrome de dios», donde parece creer que su importancia para la compañía es mayor de lo que realmente es.
Xokas cerró su vídeo dejando claro que, por primera vez en mucho tiempo, no piensa continuar promocionando World of Warcraft a menos que vea un cambio significativo. Aunque continuará jugando la versión clásica del juego, ha dejado en el aire su relación futura con el retail, una relación que, según él, ha sido dañada por decisiones empresariales cuestionables y un trato poco profesional por parte de los nuevos gestores subcontratados.
El poder y la responsabilidad de los creadores de contenido
El Xokas tiene todo el derecho de expresar su opinión sobre el estado de World of Warcraft y sobre cómo Blizzard maneja sus expansiones, pero cuando se cruza la línea hacia el ataque personal, se pierde toda la razón. Un creador de contenido de su tamaño debe ser consciente de la influencia que tiene y de la responsabilidad que eso conlleva. Esperemos que en el futuro, sus críticas se centren más en el contenido y menos en las personas que, al final del día, solo están haciendo su trabajo.
¿Qué opinas tú? ¿Crees que Xokas ha cruzado la línea o que tiene razón en sus quejas? Únete a la discusión en nuestro Discord.