El mundo de Azeroth se expande una vez más con el lanzamiento de la décima expansión de World of Warcraft, The War Within, pero esta vez el entusiasmo de los jugadores ha sido empañado por una estrategia de monetización que muchos consideran una tomadura de pelo. A pesar de que World of Warcraft ya cuenta con un sistema de monetización robusto, que incluye la compra del juego base, expansiones, una suscripción mensual, microtransacciones para oro, venta de cosméticos, skins, mascotas y monturas, ahora Blizzard ha decidido añadir una capa más: el acceso anticipado de tres días, solo disponible para aquellos que compren la Epic Edition, la cual incrementa el precio en 40€ adicionales.
Esta nueva práctica ha generado descontento entre la comunidad, especialmente porque el acceso anticipado se ha programado para el fin de semana, mientras que el lanzamiento oficial es un martes, lo que significa que la mayoría de los jugadores adultos que trabajan no podrán disfrutar plenamente de la expansión hasta varios días después.
The War Within trae consigo nuevas características como la zona de Khaz Algar, el sistema de Warbands, las Delves y los nuevos talentos de héroe, pero todo esto queda ensombrecido por la creciente percepción de que Blizzard está priorizando las ganancias por encima de la experiencia del jugador.
La comunidad se pregunta hasta dónde llegará esta tendencia de monetización agresiva, y si World of Warcraft, un juego que ha marcado a generaciones, seguirá manteniendo su legado o se convertirá en un símbolo de explotación corporativa.
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