11 bit studios ha anunciado con entusiasmo a través de su cuenta oficial de Twitter que Frostpunk 2 ha vendido más de 350.000 copias, logrando además cubrir los gastos totales de producción y marketing. El estudio agradeció a los jugadores por el apoyo, mencionando que este hito «casi derrite nuestros corazones congelados». Aunque celebran el éxito alcanzado, han asegurado que el trabajo continúa con actualizaciones, parches y correcciones que mejorarán la experiencia de juego, para lo cual la retroalimentación de la comunidad es crucial.
Frostpunk 2 lleva el género de supervivencia urbana a un nuevo nivel, poniendo a los jugadores en el papel de un Gobernante que debe guiar a su ciudad a través de una serie de calamidades en un mundo posapocalíptico azotado por un invierno eterno. La expansión de la ciudad es fundamental para la supervivencia, ya que requiere recursos como carbón y petróleo para mantener a los ciudadanos con calor y alimentos. A medida que la ciudad crece, también lo hacen los desafíos, pues el número de habitantes aumentará lentamente, lo que complicará las labores de gobierno y gestión de sus necesidades.
Uno de los aspectos más destacados del juego es el conflicto entre las distintas facciones que coexisten en la metrópolis. Cada grupo tiene sus propios intereses y su propia visión del futuro, y como Gobernante, los jugadores deberán equilibrar estas demandas y tomar decisiones difíciles sobre cómo dirigir la sociedad hacia un futuro incierto. Además, el juego introduce un Consejo, donde cada facción busca influir en la dirección de la ciudad, creando una dinámica política que añade una capa de complejidad estratégica.
La campaña principal de Frostpunk 2 se desarrolla a lo largo de varios capítulos, siguiendo de cerca la vida del Gobernante y haciendo sentir al jugador el peso de las decisiones que afectan a miles de ciudadanos. Para aquellos que prefieran una experiencia más libre, el título incluye un modo sandbox llamado constructor de utopías, que ofrece la posibilidad de experimentar con las estructuras sociales y urbanísticas sin limitaciones de tiempo.
Otra característica clave de esta secuela es la incorporación de una herramienta de creación de mods llamada FrostKit, que permitirá a los jugadores diseñar sus propios mapas, modelos y escenarios. Esto amplía enormemente la rejugabilidad, ya que el destino de la ciudad solo estará limitado por la creatividad de los jugadores.